Prólogo de Benigno Pendás
Avilés, 2022.
ISBN: 978-84-124863-5-3.
Páginas: 576.
Encuadernación: Tapa dura.
Formato: 17 x 24 cm.
PVP: 35 €.
Democracia parlamentaria, república, laicismo, estado de derecho, institucionismo y reformismo
José Manuel Díaz-Pedregal y Sánchez-Calvo consagró su vida a estos ideales. Heredó los primeros de su padre, Manuel Pedregal Cañedo, uno de los protagonistas de la primera experiencia republicana —en la que desempeñó la cartera de Hacienda— y cofundador junto a Giner, Azcárate y otros de la Institución Libre de Enseñanza, referente pedagógico e intelectual, que luego él llegó a presidir. Tras militar en Fusión y Unión Republicana, participó en la fundación y dirección del Partido Reformista promovido por Melquiades Álvarez.
Diputado a Cortes por Avilés y ministro de Hacienda —como su padre— en 1922, dimitió pronto de este cargo al no ser admitida su propuesta para recortar el Ejército, ni la inclusión de la libertad de cultos en la reforma constitucional que se gestaba. Al proclamarse la Segunda República, en abril de 1931, fue nombrado presidente del Consejo de Estado y luego elegido miembro del Tribunal de Garantías Constitucionales, en 1933. Niceto Alcalá-Zamora le encargó aquel mismo año formar un gobierno de concentración republicana, que no logró, y más tarde sería retenido por los revolucionarios asturianos en octubre de 1934, tras lo cual fue distinguido con la Banda de la Orden de la República. Después de la guerra civil, decepcionado, abandonó la actividad política, hasta fallecer en Avilés a comienzos de 1948.
Prologado por el profesor Benigno Pendás, catedrático de Ciencia Política, exdirector del Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, consejero de Estado y actual presidente de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, donde ocupa la misma Medalla 10 de la que fue titular Pedregal, este libro recorre por primera vez —con detalle y abundante documentación inédita— su vida, que, pese a disfrutar de una posición social y económica acomodada —que le proporcionó independencia—, no fue fácil para él, marcada por la tragedia de perder a su madre siendo niño y sufrir la muerte prematura de dos de sus cuatro hijos.